CINCUENTA PREGUNTAS

La mayoría de nosotros (por no decir todos) odiamos este tipo de tests. Sin embargo, a veces, cuando estamos aburridos, los hacemos, por pasar el rato. No son peor que un crucigrama o un sudoku, o leer el horóscopo. Si os apetece, aquí lo tenéis con mis respuestas. Hay 50 preguntas. Yo creo que hacerse preguntas a uno mismo nunca es malo.



1. Tu nombre: Charo, Chari, Rosario

2. ¿Por qué te llamaron así? Me toco por una hermana de mi madre

3. ¿En qué te pareces a tu padre? Pues nos parecemos más de lo que parece, físicamente, el amor por los animales, el campo… y los dos odiamos hablar por teléfono.

4. ¿En qué te pareces a tu madre? El sobreproteger a los hijos.

5. Un sueño imposible: Todos los sueños son posibles, simplemente no hay que ser demasiado exigente

6. Un sueño posible: Ver mi (nuestra) novela publicada.

7. ¿Por qué no se ha cumplido? Porque no la he (hemos) enviado a ninguna editorial.

8. ¿Cuál es la esencia de ti mismo? La exigencia

9. Un libro que has leído varias veces: Yo, Claudio, de Robert Graves

10. ¿Qué le faltó a tu infancia? Nada, fue sensacional.

11. ¿Qué le sobró? Nada, ya lo he dicho antes.

12. ¿Qué es Dios para ti? Para mí Dios es Zeus, sin más

13. Un chiste que te haya hecho pensar: Inteligencia militar son dos términos que se contradicen.

14. ¿Qué actor o actriz te gustaría que hiciese de ti en una película sobre tu vida? Ninguna, no siento predilección por ninguna en especial, ni tan siquiera desearía que se hiciera una película de mi vida, y menos que la hagan los yanquis, que lo estropean todo. (Bueno, Blade Runner es una excepción)

15. ¿Qué ignoras y te molesta? Hay muchas cosas que no sé y sí… me molesta.

16. Algo que sí sabes y que nunca olvidarás: lo que es el amor.

17. ¿Qué es lo que más valoras de estar vivo? Que todo está por hacer y todo es posible (gracias a Martí i Pol)

18. ¿Por qué duele tanto la pérdida? La suerte es que los humanos tendemos a idealizar esa pérdida y se convierte en algo agradable con el tiempo.

19. Un vicio negativo: No hay vicios ni negativos.

20. Un vicio positivo: Mis gatos, pueden más que yo.

21. ¿Qué es lo que más te gusta de la monotonía? Me encanta la monotonía.

22. ¿Quién serías en tu próxima vida? Sin duda un héroe griego de la Iliada, me pido a Héctor.

23. ¿Qué te apasiona? La historia de Grecia

24. ¿Qué te ilusiona? Tener ganas de vivir y mis gatos. (creo que ya lo dije)

25. ¿Qué te bloquea? La autoexigencia

26. ¿De qué tienes miedo? De no tener tiempo de hacer todo lo que quiero hacer en esta vida.

27. ¿Qué harías si se fuera a acabar el mundo? Pues no tengo ni puta idea.

28. Un mal consejo al que hiciste caso: Ten paciencia y ya verás como todo se arregla.

29. Un buen consejo que no quisiste escuchar: “Esta niña sirve para estudiar.”

30. ¿Qué es lo primero que te viene a la mente cuando te metes en la cama y cierras los ojos? ¿Está todo cerrado?

31. Un sueño que no hayas sabido interpretar: Uf, no sabría escoger.

32. ¿Qué echas de menos últimamente? Tener a mi familia más cerca.

33. ¿Qué sensación te produce la soledad? Me gusta la soledad, soy una solitaria empedernida.

34. ¿Cómo se entiende el amor sin sufrimiento? No es difícil entenderlo para mí. He tenido suerte, y me lo he currao, que leñe.

35. ¿En qué círculo vicioso sueles caer? El de no acabar las cosas que empiezo.

36. Un momento feliz no idealizado: Soy una idealista nata.

37. Unos versos:

Muere lentamente quien se transforma en esclavo
del hábito, repitiendo todos los días los mismos
trayectos, quien no cambia de marca, no arriesga vestir
un color nuevo y no le habla a quien no conoce.

Muere lentamente quien hace de la televisión su
gurú.

Muere lentamente quien evita una pasión, quien
prefiere el negro sobre blanco y los puntos sobre
las "íes" a un remolino de emociones, justamente las
que rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de los
bostezos, corazones a los tropiezos y sentimientos.

Muere lentamente quien no voltea la mesa cuando
está infeliz en el trabajo, quien no arriesga lo cierto
por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien no se
permite por lo menos una vez en la vida, huir de los
consejos sensatos.

Muere lentamente quien no viaja, quien no lee,
quien no oye música, quien no encuentra gracia en sí
mismo.

Muere lentamente quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.

Muere lentamente, quien pasa los días quejándose
de su mala suerte o de la lluvia incesante.

Muere lentamente, quien abandona un proyecto
antes de iniciarlo, no preguntando de un asunto que
desconoce o no respondiendo cuando le indagan sobre
algo que sabe.

Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando
siempre que estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor
que el simple hecho de respirar.
Solamente la ardiente paciencia hará que
conquistemos una espléndida felicidad.

."

38. ¿Qué te duele que te digan? Que solo pienso en mi misma

39. ¿Dónde termina tu paciencia? Donde empieza el abuso del otro

40. Esa horrible canción que tanto te gusta: Qué lástima pero adiós…

41. Una palabrota: Cabrón

42. El piropo más bonito del mundo: “esta es tu calle” mientras paseamos de la mano por la Calle Princesa

43. ¿Qué eres? Un compendio de incongruencias

44. ¿Qué serías si tus padres hubieran tomado todas tus decisiones por ti? Ni siquiera logro imaginarmelo, con siete hijos mis padres no tenían teimpo de tomas decisiones individuales

45. Tu mentira favorita: Si eso, ya te llamo (odio hablar por teléfono)

46. Una contradicción común en ti: Todas.

47. Una injusticia que toleras: Es muy difícil para mi tolerar las injusticias..

48. Una injusticia que detestas: Todas las injusticias.

49. ¿Qué pregunta te hubiera gustado responder? ¿Qué tres cosas te llevarías a una isla desierta?

50. Respóndela: A Rusell Crowe, un rioja y como diría Marilyn, unas gotas de Chanel.


Gracias por llegar hasta aquí.

Ahora si queréis hacerlo vosotros, ya sabéis cómo funciona: copiáis el texto, lo pegáis en un nuevo mail y cambiáis mis respuestas por las vuestras. Entonces lo enviáis a quien os lo envió y a quien queráis. Si lo enviáis a más de diez personas, no se os va a cumplir ningún deseo. Qué pena, ¿verdad?