Como va siendo habitual, pues otro año que estoy por aquí dando la lata y molestando. Y tan feliz como una perdiz. Y es que he aprendido que todo es relativo, que todo se supera y que aunque los años pasen y nos vayamos haciendo viejos, aquí estamos.
A mis viejitos, a mis herman@s, a mis amig@s, a mis perr@s, a mis gat@s, a todos los que han compartido un trozo de mi vida y a todos los que van a compartirlo.
Te deseo muchas felicidades y que sigas animandote a escribir. UN beso y que cumplas muchos masssssssss.
ResponderEliminarFelicidades, Charo, aunque sea con algo de retraso. 44 años... Son tan hermosos los 44. Yo, ya ves, 'ya no tengo 55' (aunque yo diga que los tengo), porque se me han ido tan rápidos que sería estupendo volver a tener 44, y menos aún. No los tengo, pues, aunque diga que sí, pero los he vivido y he tenido venturas y desventuras, como toda vida. Lo importante, en suma, es que seguimos viviendo, cumpliendo años y perdíéndolos. Pero... así es la existencia.
ResponderEliminarUn abrazo y espero que llegues a los 100, por lo menos :)
Gracias Mayte, si animada estoy lo que no encuentro es el tiempo (burda excusa, cuando se quiere escribir se saca el tiempo de donde sea) (Este subsconciente mío que no me deja tranquila)
ResponderEliminarun beso
Mari Carmen, y tú que lo veas. :)
ResponderEliminarPues si, creo que es importante cumplirlos, a mi siempre me ha hecho ilusión. Cada nuevo año es un descubrimiento hacia otra cosa, no creo que eso deba decepcionarnos, muy al contrario. Todas las etapas de la vida son bonitas, y hay que aprovecharlas.
Un beso